Tras casi dos meses de ideas, manualidades, trabajo, ensayos y sobre todo cariño, todo infantil compramos nuestras entradas en la taquilla y espectantes pasamos al teatro improvisado que fue la clase de segundo de infantil.
Allí nos esperaban las acomodadoras que linterna en mano nos ayudaron a buscar nuestro asiento (todos numerados).
Y ya...solo quedaba guardar un poquito de silencio y...DISFRUTAR!
Tras el teatro de sombras nos esperaba algo que también nos encantó...una merendola por todo lo alto!!
Y ya solo me queda decir GRACIAS con mayúsculas porque cuando lo planteamos en clase no habría podido imaginar un resultado tan brillante, me encanta contar con familias que se implican de verdad en esta tarea tan bonita que es la educación de sus hijos. Y esque juntos es mucho más efectivo y por supuesto más divertido!
Un abrazo enorme a TODAS las familias de segundo de infantil (pudieran o no participar) y vamos pensando nuevas actividades...
No hay comentarios:
Publicar un comentario