Una de las cosas que más nos gusta hacer es dramatizar nuestros cuentos favoritos, además esta actividad favorece su desarrollo del lenguaje, la expresión y la comunicación verbal...
Ayer le tocó el turno a la Bella Durmiente, primero repartimos los papeles...como es obvio todas las chicas (y algún chico) querían el papel de la bella durmiente, pero llegamos al acuerdo de que fuera la prota quien lo representara. Cada uno elije el que más le gusta y es por eso que a veces representamos los 6 cerditos, o los 13 cabritillos...
Yo narro el cuento y ellos van dramatizano las escenas:
Llegamos en la parte en la que la bella durmiente se ha pinchado con una aguja y queda sumida en placentero sueño...(no le va mal este papel a la prota...)
Todos los habitantes del reino quedan dormido profundamente a la vez que la princesa...
Hasta que cien años más tarde...aparece el príncipe dispuesto a salvar a su princesa...
El príncipe se acerca, y la besa...
La princesa despierta de su profundo sueño y se queda alucinada con el príncipe guapísimo que ha acudido a salvarla...
Todo el reino despierta poco a poco con ellos, y se ponen realmente contentos de ver a los príncipes felices..
Los príncipes de abrazan enamorados...
Y finalmente y como en todo cuento, acaban casándose y comiendo perdices...
COLORÍN COLORADO ESTE CUENTO SE HA ACABADO...
